A medida que envejecemos, los tejidos subyacentes que mantienen la jovialidad y la firmeza de nuestra piel comienzan a romperse debido a los efectos de la gravedad, la exposición al sol, la alimentación, los factores genéticos y los años de movimiento de los músculos faiales. Con el transcurso del tiempo, estos factores contribuyen al desarrollo de líneas, arrugas y pliegues en el rostro.

El ácido hialurónico es una molécula de azúcar que, al igual que una esponja, su función principal es ligar y absorber las moléculas de agua, lo cual crea volumen en el rostro.

La Remodelación Facial con Implantes de Relleno constituyen uno de los tratamientos disponibles que más aceptación está teniendo, al reemplazar el ácido hialurónico corporal que se ha reducido con el paso del tiempo, restaurando el volumen debajo de la superficie de la piel.

Las zonas que más se suelen tratar son:

• Líneas de la nariz a la boca (Surcos nasolabiales).
• Entrecejo (Lineas de la zona glabelar).
• Labios (Añadir volumen y perfilado).
• Pómulos y Mentón (Remodelar y Realzar)
• Dorso de las manos, escote, cara y cuello (Rejuvenecimiento cutáneo)

Esta técnica sencilla consiste en inyectar el ácido hialurónico con una aguja ultrafina en la dermis en los diferentes puntos a lo largo del borde del área de tratamiento, inyectando el relleno a lo largo de la extensión de la arruga o pliegue hasta que se haya logrado la corrección máxima.

Para este tratamiento no se necesita anestesi.

Antes de comenzar el procedimiento, se limpiarán las áreas de tratamiento, generalmente utilizando un limpiador a base de alcohol.

El aspecto mejorará rápidamente, proporcionándole un resultado natural y duradero.

Con el tiempo, el cuerpo metabolizará y absorberá todo el ácido hialurónico inyectado. Aunque la duración de los resultados varía en cada paciente, los resultados de las inyecciones de ácido hialurónico se mantienen durante 6 a 12 meses.